Este alimento de los Dioses proviene de una planta originaria del Amazonas. Se piensa que los antiguos pobladores mesoamericanos, hace 5000 años, lo habrían encontrado y transportado hasta el sur de México, donde lo conocemos como Xocolatl.

El cacao fue sin duda, un gran regalo del que debemos estar muy agradecidos. Además de ser delicioso cuenta con múltiples beneficios para nuestro organismo.

El cacao podríamos considerarlo como un “superalimento”, ya que contiene más de 50 nutrientes y componentes bioactivos que aportan propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.

Actualmente, es objeto de numerosas investigaciones, pues ha demostrado  grandes beneficios para la salud. Gracias a los nutrientes que contiene como fibra, vitaminas, minerales y polifenoles, es necesario incluirlo en nuestra alimentación.

Aunque es el ingrediente clave para la elaboración de uno de los grandes placeres de la gastronomía, el chocolate, hay que aprender a diferenciar muy bien estos dos alimentos. Hay chocolates que la mayor parte de su composición es azúcar y algunos saborizantes. Este tipo de producto, definitivamente no aportaría los mismos beneficios que un chocolate que cuente con un 80% de cacao.

Grandes Propiedades Nutrimentales

Un grano de cacao contiene una enorme cantidad de sustancias nutritivas. 50% de grasa en forma de manteca, entre 11 y 12% de proteínas, 7 y 8% de almidón, y en menores cantidades tiene azúcar,   teobromina, cafeína, y 300 sustancias más. El mayor contenido en  magnesio, el cual lo podemos encontrar de manera cruda.

Las hojas de cacao y las semillas, pueden ser empleadas en la medicina tradicional para aliviar diversos dolores y malestares, como asma, diarrea, debilidad, parasitismo, pulmonía, cólicos, tos, etc. Mientras que la manteca de cacao, además de hidratar, es un remedio tópico. Se utiliza para tratar labios resecos, heridas, erupciones, afecciones dérmicas e incluso la malaria y el reumatismo.

Beneficios para nuestro organismo

Además de los beneficios nutrimentales que ya mencionamos, el cacao nos aporta aún más. Gracias a sus flavonoides que protegen contra el daño celular que ejercen los radicales libres. El cacao es ideal para cuidar nuestro sistema cardiovascular, previniendo las enfermedades del corazón y ayudando a reducir el colesterol y los triglicéridos.

Estimula nuestro sistema digestivo, es decir, nos ayuda a acelerar la digestión. Hay estudios que señalan que es bueno para el estreñimiento.

También es bueno para la piel, el cabello y contra la celulitis. Gracias a  sus propiedades hidratantes y antioxidantes. Es por ello que se usa el extracto del cacao en tratamientos de belleza, como las sesiones de chocoterapia.

¿Te has dado cuenta que cuando comes chocolate te pones feliz? Esto se debe a la presencia de feniletilamina, la cual actúa en el cerebro desencadenando un estado de bienestar emocional y de euforia. De igual forma, ayuda a la producción de endorfinas, lo que provoca una mejora en el estado de ánimo.

Finalmente, no olvidemos que es un producto extremadamente energético, así que si sabes que tu día será considerablemente largo y cansado, te recomendamos cargar con un poco de chocolate que esté hecho en un 80% de cacao, tal y como el nuestro.